QUIERESS SER MI VALENTINE???

En el calendario comercial hay 2 fechas que detesto más que otras: una es el 31 de octubre (Halloween) y la otra es ésta, el 14 de febrero (día de San Valentín).
Basándose en la misma estructura de cada celebración sin sentido, entiéndase día de la madre, del padre, del abuelito, del amigo, etc. Cada fecha a celebrar tendrá su análisis destructivo aquí. Ésta fecha es insoportablemente cursi y simplemente más rabia que los propios “tortolitos”, me da el entorno que aviva ésta fecha. No puede ser que todo sea tan lindo y haya amor por todos lados.
Independiente del hecho que yo NUNCA he celebrado el maldito día y espero no tener que celebrarlo nunca, el ambiente que se vive desde que en el calendario se marca el inicio de febrero hasta el día después (15) es insoportable, los medios hacen sentir al que no tiene pareja como un ser anormal que simplemente no tiene cabida en un mundo en que todo está hecho para la “pareja”; todo es “para 2”, “para usted y su acompañante”, “usted y su ser querido”, y simplemente uno no puede evitar pensar “¿acaso estoy en el lugar equivocado? ¿Desde cuando TODO el mundo está enamorado? ¿Por qué estoy solo? es natural preguntarse eso cuando uno ve tanto divorcio en trámite o tanta pelea intrafamiliar que termina en asesinato a punta de machetazos en alguna comuna populosa.
Es lamentable, pero a éstas alturas, si bien uno debería estar más que prevenido, debido a que se lleva celebrando hace tanto tiempo que no es como para alarmarse, pero sí llega un punto en que todo cansa; pasamos el año celebrando lo incelebrable, pero como sociedad consumista que somos, tenemos que hacernos los lesos, y si no, bueno, pagamos el precio de ser marginados del resto, porque nos convertimos en “aguafiestas”, por qué marginarse de una celebración tan linda como el amor? Por qué no reconocer y saludar a una madre? Y ¿por qué tiene que ser el día que me dicen que tengo que celebrarla y no cuando yo quiero saludarla?
Se podría decir que, como todo en la vida, al estar enamorado, ya sea hombre o mujer, se cae en un estado de idiotez involuntaria que hace que uno haga cosas que no debe, como hablar con “cuchi, cuchi, chanchi, perrito, chanchito, gordita, etc”; entonces al ser un idiota mental, tenemos que hacer caso a lo que dicta el sistema y ése es celebrar cuando nos dicen que celebremos, no antes ni después. Carece de todo sentido entregar una flor el 13 de abril, por qué no lo hiciste el 14 como todo el mundo? Porque “yo decido qué día celebrar” puede ser la respuesta,. Pero el hecho de que estamos condicionados a celebrar cuando nos dicen para no sentirnos excluidos de una sociedad donde nos refriegan en la cara, ya sea por envidia, cachetoneo o lo que sea, que los demás lo pasan mejor que uno, uno simplemente quiere permanecer en la manada y no ser tratado como un paria que no celebra, ya sea porque no tiene plata o no tiene con quien celebrar un día tan desagradable como el 14 de febrero.
La lista de basura que se regala es tan numerosa como los mismos idiotas que lo celebran, llega el punto de la cursilería y la idiotez que hacen que simplemente no se pueda ni sacar a pasear al perro a la plaza porque simplemente está llena de parejas “expresando” su amor a los 4 vientos ¡quien quiere mostrarle al mundo que está enamorado?, todos se sienten especial cuando están enamorados, pero ¿acaso no todos se sienten el hombre o la mujer “más feliz del mundo” cuando están con alguien? Patrañas!
Al final de cuentas todos se sienten igual y no es mucha la diferencia entre el enamoramiento de una pareja con otra y todos se convierten en clones que hacen y dicen los mismos clichés.
Si en algo estoy de acuerdo con jorge González es que tiene razón cuando dice que “siendo estúpido serás feliz” en Paramar. Independiente que yo encuentre que González es un imbécil, le concedo que reflejó muy bien el estado del “enamorado” en ésa canción, uno se vende por el ser amado, deja de ser quien es para agradar, dice las mismas palabras de amor que dejan de tener un real significado y que finalmente se diluyen en un mar de regalos, chocolates, flores y ositos de peluche que después con el correr del tiempo terminan en un basurero cualquiera, tan botados como uno.

FELIZ DÍA DE SAN VALENTIN….