EL REGRESO DE LOS MUERTOS VIVIENTES

Al empezar a escribir esto me da risa, mucha risa y mi guata no puede dejar de doler de las carcajadas que doy al escuchar las declaraciones, llamados y posturas del Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez.
El titulo de ésta columna lo dice todo; su momento clave en la historia del país fue en dictadura, hoy es tan inútil y obsoleto como lo es el partido Comunista.
Escuchar su llamado a movilización, su llamado a combatir la lucha social está tan fuera de lugar que da risa y llevar el tema a un debate más profundo no tiene sentido porque seria darle una importancia que realmente no tiene.
En dictadura seguramente yo habría participado en el FPMR, porque era una época que debía lucharse a brazo armado, no estábamos precisamente en “guerra”, pero había que combatir y, a punta de armas era una vía válida; hoy, eso no tiene sentido porque la cara del enemigo no tiene lentes oscuros ni un uniforme; hoy es un traje 2 piezas sentado en una oficina de la Ciudad Empresarial ganando plata. Y para combatirlo no hacen falta el amón gelatina ni las molotov; para eso hay que usar al sistema para combatirlo y las armas y los “caseroleos” están más fuera de moda que las botas blancas con flecos.
Lo peor es el discurso del FPMR, verlo hablar en el “termómetro” fue volver a 1985, claro que ésta vez uno podía ver al tipo detrás del pasamontañas y saber dónde está dando sus declaraciones, pero el discurso y el tono es el mismo, no ha cambiado nada y eso lo hace caduco al momento. Aparte que el tipo, de apellido Gálvez, creo, tiene el mismo tono de voz que Felo, así que sus discursos no pueden tomarse en serio
El miedo o temor que generaba el solo nombrar al Frente, hoy es reemplazado por una risa que, puede ser de nostalgia de parte de los más “combativos” de la dictadura o una risa lastimosa por ver a un puñado de tipos tratando de revivir viejas glorias, algo como lo que lleva haciendo el Partido Comunista desde 1990, fecha en que también se quedaron sin enemigo visible y tuvieron que extrapolarse de su propio sector para tener a un enemigo en común: la oposición. Que para ellos son todos quienes no militen en el PC. Lamentable.
Sin duda que la reaparición del Frente traerá momentos de diversión, los mismos que nos ha dado el PC y que, seguramente seguirán entregando ambos bandos a la opinión pública.
Seguro que Allende debe estar haciendo algún pacto para volver a la vida.