LIDER : ¿PARA QUIEN ES LA AYUDA SIEMPRE?

Como siempre, entre fines de mes y la mitad del mes en mi casa se hacen compras en los supermercados para rellenar las despensas con alimentos para seguir engordando; y claro, pensando en la economía del hogar es que uno ve con cuánto presupuesto cuenta y qué cosas quiere comprar. Ahora bien, las opciones, si bien son variadas, en mi casa se opta o por el Jumbo o el siempre popular Lider; pero lo de la última visita a sus dependencias dejó bastante que desear y generó un montón de dudas sobre el real objetivo de la cadena.
Partiendo de la base que el consumidor es libre de comprar donde quiera, lo que quiera, uno lo primero que piensa es “tengo unas lucas, y voy a comprar algunos productos de mi gusto”, esto ya sea por opción económica o simplemente gusto. Y se supone que en los supermercados grandes uno encuentra una “mayor variedad”, pero en los supermercados Lider ésa premisa se ha vuelto una utopía.
Si bien todos los supermercados tienen productos con sus propias marcas, lo cual está bien para los sectores menos pudientes que por diferentes razones no pueden costear algo de un precio superior, y eso se agradece porque de alguna forma no están discriminado por economía; siento y veo que en las góndolas de los supermercados Lider, la libertad de opción se ha visto reducida drásticamente. Donde uno mira hay productos “A cuenta” o “lider”, lo cual no entiendo, porque de las marcas que uno está acostumbrado a ver y comprar ya no hay mayor variedad y eso me hace dudar sobre la idea de trasfondo que pueda haber detrás de tanto producto Lider.
Después de recorrer una y otra vez los pasillos del supermercado buscando la marca que ando buscando y no poder encontrarla, me pregunto si acaso no estaré en medio de un tipo de comunismo encubierto, ya que la sensación que me queda es que al salir del local obligatoriamente tendré que hacerlo con algún producto Lider, lo cual obviamente no está dentro de agrado.
Como dicen “el libre mercado” es la libertad de poder pararse en un pasillo, mirar los productos, comparar precios, calidad, lo que sea y finalmente escoger una determinada marca y echar el producto al carrito, pero ésa libertad se a poco se ha ido reduciendo.
Obviamente está la, aún libertad de elegir el supermercado que me convenga más, y es exactamente lo que haré en mi próxima compra, pero tal como los supermercados piensan en los que no pueden pagar por una determinada marca, yo pienso en los que no pueden darse el gusto de cambiar de supermercado para adquirir sus productos de gusto y que se verán en la resignación de comprar los productos que el supermercado quiere que compren y no los que el cliente quiere.
En la última compra salí sin todo lo que había pensado comprar porque simplemente no estaban las marcas que buscaba y eso porque las estanterías estaban rebosantes de productos Lider o simplemente no había lo que buscaba y tuve que ir a otro supermercado para terminar de hacer las compras que se supone uno podía hacer en un solo lugar.
La comodidad de hacer las compras en un solo lugar es la gracia de los supermercados, por la variedad (ya dije eso), pero si eso ya no es posible, obviamente que las costumbres de los consumidores podrían cambiar porque los hábitos de los supermercados al parecer no lo harán.
No estoy en contra de Lider, aunque no concuerdo con sus ciertas de sus políticas, pero tampoco voy a empezar una batalla contra u gigante, pero siempre es necesario hacer notar algo que no todo el mundo ve y que puede tornarse sospechoso tanto por el discursos que ofrece la cadena como la calidad de vida que quieren hacer llevar al consumidor promedio.
Puede que no sea para tanto, pero al final puede que la pequeña ayuda siempre, no sea para uno.